¿Qué es el bótox?
Se trata de una sustancia llamada toxina botulínica, conocida más popularmente como bótox. Se encarga de corregir las arrugas faciales en zonas localizadas.
Cuando se inyecta, la toxina botulínica bloquea determinadas señales nerviosas que producen la contracción de los músculos. Los músculos se relajan, con lo cual se reducen las arrugas. Luego, los músculos vuelven a moverse y las arrugas reaparecen.
El procedimiento es rápido y sencillo sin necesidad de anestesia. Los resultados se aprecian pasados 2 ó 3 días y el efecto se prolonga durante 4 ó 6 meses.
Si es necesario se realiza un retoque pasados 15 días.
DURACIÓN: dependiendo de las zonas a tratar pero por zona unos 20 minutos.
SESIONES RECOMENDADAS: 1 cada 4/6 meses.
RESULTADOS: desde la primera sesión.
INDICADO PARA: pieles que necesitan luminosidad y renovación.
QUÉ CONSEGUIMOS: piel regenerada, efecto antiaging, piel luminosa e hidratada.